El clonazepam es un medicamento controlado, sujeto a regulaciones especiales debido a su potencial de abuso y dependencia. Su uso está estrictamente limitado a prescripción médica, y se recomienda utilizarlo bajo la estrecha supervisión de un profesional de la salud. No se recomienda su uso durante el embarazo, la lactancia, en combinación con alcohol o si tiene que conducir o realizar actividades que requieran alerta mental, ya que puede causar somnolencia y alterar significativamente la capacidad de reacción. La interrupción del tratamiento con clonazepam debe hacerse de manera gradual para evitar síntomas de abstinencia. Si tiene alguna duda sobre los efectos del clonazepam, consulte a su médico o farmacéutico.