El fluconazol es un medicamento antimicótico derivado del triazol, ampliamente utilizado para tratar una variedad de infecciones fúngicas. Este poderoso agente es efectivo contra infecciones por levaduras presentes en diferentes partes del cuerpo, como la vagina, la boca, la garganta, el esófago, el abdomen, los pulmones, la sangre, y otros órganos. Se destaca por su capacidad para ralentizar el crecimiento de los hongos, lo que facilita la recuperación del paciente. Además, el fluconazol desempeña un papel crucial en el tratamiento de la meningitis y otras infecciones por levaduras en pacientes sometidos a quimioterapia o radioterapia antes de un trasplante de médula ósea.
En forma de tabletas, cápsulas, polvo para solución oral y solución inyectable, su administración puede ser tanto oral como intravenosa, dependiendo de la presentación y la necesidad clínica. La flexibilidad en su administración, junto con el protocolo de dosificación que puede variar desde una dosis única hasta un tratamiento de varias semanas, lo convierte en una opción versátil para profesionales de la salud. Es importante seguir las indicaciones médicas al pie de la letra, ya que el abandono prematuro del tratamiento puede resultar en la reaparición de la infección. Con la adherencia adecuada al tratamiento, los pacientes suelen empezar a notar una mejora en pocos días.
Consulte siempre a su médico antes de usar cualquier medicamento. A continuación se detallan las indicaciones de Fluconazol, pero su uso debe ser supervisado por un profesional de la salud.
- Este medicamento pertenece al grupo de antimicóticos llamados triazoles, que funciona haciendo más lento el crecimiento de los hongos que causan la infección.
- El fluconazol se usa para tratar las infecciones por hongos, incluidas las infecciones por levaduras de la vagina, la boca, la garganta, el esófago (el conducto que va desde la boca hasta el estómago), el abdomen (el área entre el pecho y la cintura), los pulmones, la sangre y otros órganos.
- También se utiliza para tratar la meningitis (infección de las membranas que recubren el cerebro y la columna vertebral) y las infecciones por levaduras en pacientes que es probable que se infecten porque están siendo tratados con quimioterapia o radioterapia antes de un trasplante de médula ósea (reemplazo del tejido esponjoso enfermo dentro de los huesos con tejido sano).
Los medicamentos, aunque son esenciales para tratar diversas condiciones de salud, pueden conllevar a efectos secundarios. Algunos efectos comunes incluyen náuseas, vómitos, cansancio extremo y dolor de cabeza, mientras que los severos abarcan desde sangrado o moretones inusuales hasta la dificultad para respirar o tragar. Es relevante informar a su médico si experimenta síntomas serios o si los efectos comunes persisten o se agravan. La comprensión y el manejo de estos efectos secundarios son cruciales para asegurar un tratamiento efectivo y minimizar complicaciones. Este resumen ayuda a los pacientes a estar mejor informados sobre los posibles riesgos y a tomar decisiones más informadas respecto a su salud. Cabe recordar que es fundamental seguir las indicaciones médicas y reportar cualquier anomalía experimentada durante el tratamiento.
Efectos secundarios comunes
- Náuseas
- Vómitos
- Cansancio extremo
- Dolor de cabeza
- Mareos
- Diarrea
- Dolor de estómago
- Acidez estomacal
- Cambios en la capacidad para percibir los sabores de los alimentos
Otros efectos secundarios
- Síntomas parecidos a los de la gripa
Efectos secundarios graves
- Sangrado o moretones inusuales
- Falta de energía
- Pérdida del apetito
- Dolor en la parte superior derecha del abdomen
- Coloración amarillenta en la piel o los ojos
- Orina de color oscuro
- Heces de color pálido
- Convulsiones
- Sarpullido o picazón
- Ampollas o descamación de la piel
- Urticaria
- Inflamación de la cara, la garganta, la lengua, los labios, los ojos, las manos, los pies, los tobillos o las pantorrillas
- Dificultad para respirar o tragar
Efectos secundarios reportados
- Náuseas
- Vómitos
- Cansancio extremo
- Sangrado o moretones inusuales
- Falta de energía
- Pérdida del apetito
- Dolor en la parte superior derecha del abdomen
- Coloración amarillenta en la piel o los ojos
- Síntomas parecidos a los de la gripa
- Orina de color oscuro
- Heces de color pálido
- Convulsiones
- Sarpullido o picazón
- Ampollas o descamación de la piel
- Urticaria
- Inflamación de la cara, la garganta, la lengua, los labios, los ojos, las manos, los pies, los tobillos o las pantorrillas
- Dificultad para respirar o tragar
- Dolor de cabeza
- Mareos
- Diarrea
- Dolor de estómago
- Acidez estomacal
- Cambios en la capacidad para percibir los sabores de los alimentos
Consulte siempre a su médico antes de usar cualquier medicamento. A continuación se detallan las indicaciones de Fluconazol, pero su uso debe ser supervisado por un profesional de la salud.
- Antes de ser administrado este medicamento, informe a su médico si: Es alérgico al fluconazol, a otros medicamentos antimicóticos como el itraconazol, ketoconazol, posaconazol o voriconazol, algún otro medicamento o sustancia.
- Usted tiene o alguna vez ha tenido cáncer; el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA); latidos cardíacos irregulares; niveles bajos de calcio, sodio, magnesio o potasio en la sangre; afecciones hereditarias poco comunes en las que el cuerpo no puede tolerar la lactosa o la sacarosa; o enfermedad del corazón, de los riñones o del hígado.
- Está embarazada, planea quedar embarazada o si está amamantando. Sobre todo si está en los primeros 3 meses de embarazo, dado que el fluconazol puede causarle daños al feto.
- Informe a su médico qué medicamentos con y sin receta médica, vitaminas, suplementos nutricionales y productos naturales está tomando o tiene planificado tomar.
- Informe a su médico que ha recibido fluconazol antes de comenzar a tomar cualquier medicamento nuevo en el término de 7 días de haber terminado su tratamiento.
- Es posible que su médico deba cambiar las dosis de sus medicamentos y supervisarle atentamente para evitar que usted sufra de cualquiera de los efectos secundarios reportados.
- Si se va a someter a una cirugía, incluso dental, informe al médico u odontólogo que está tomando fluconazol.
- Tenga en cuenta que este medicamento puede provocarle mareos o convulsiones. No conduzca vehículos ni opere maquinaria hasta que sepa cómo le afecta.
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